miércoles, 2 de marzo de 2016

Cascadas del Uces



Aunque la previsión meteorológica era pesimista, disfrutamos un día precioso caminando junto a las cascadas del Uces y su entorno. Comenzamos la jornada por el Pozo de los Humos, que tenía un buen caudal gracias a las lluvias caídas durante la semana. El siguiente hito forzosamente debía de ser el Pozo Airón y echar una vista sobre las Arribes del Duero junto a la desembocadura del arroyo de los Cuernos. Aparte de los habituales buitres, pudimos ver volando a una pareja de águilas reales y a otra de cigüeñas negras.

De allí nos acercamos a ver las Cachoneras del Uces cuyos rápidos y cascadas anticipan la gran caída que vendrá después. Todo el Uces es formidable, con su color oscuro que nada tiene que ver con la contaminación y que se rompe estruendoso entre saltos a cual más sobrecogedor. ¡Qué magnífico recurso natural! Ojalá seamos capaces de mantener su belleza salvaje, de vigilar e impedir los desmanes que puedan estropear o afear estos lugares.

Ya desde Masueco nos acercamos a la cascada del Pinero (y no de la "Cola de Caballo", como erróneamente se la quiere llamar). Como casi todo el mundo sabe, una de sus particularidades es que se puede caminar sin problemas por detrás de la misma, igual que ocurre en el Pozo Airón.

En la subida hacia Masueco por el sendero que viene desde la zona más próxima al río se puede contemplar la desembocadura del Uces en el Duero, donde mejor se aprecia la diferencia de color entre ambos ríos.

Para rematar el día, el atardecer fue de los que se recuerdan, con un color amarillo intenso que teñía árboles y campos, en contraste con los nubarrones que estaban dejando lluvias más hacia el Este. Un arco iris precioso parecía el marco de una magnífica jornada.

Pincha aquí o en la foto, para acceder a una presentación de fotos de la jornada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario